Cáncer de Próstata: Riesgo y Detección Temprana
El cáncer de próstata es una de las enfermedades más comunes entre los hombres, y comprender los factores de riesgo y la importancia de la detección temprana es crucial para mejorar los resultados de salud. Con el conocimiento adecuado sobre los síntomas y las opciones de diagnóstico, se pueden tomar medidas proactivas para enfrentar este desafío. Exploraremos a fondo cómo la detección temprana y la evaluación del riesgo pueden marcar una gran diferencia en la lucha contra el cáncer de próstata, brindando a los pacientes mejores oportunidades para un tratamiento efectivo y una recuperación exitosa.
El cáncer de próstata es uno de los tipos de cáncer más frecuentes que afectan a los hombres en todo el mundo.
Cada año, el Día del Cáncer de Próstata nos brinda la oportunidad de reflexionar sobre la importancia de la detección temprana y las innovaciones disponibles que permiten realizar un diagnóstico más efectivo de esta patología.
¿Qué es el Cáncer de Próstata?
La próstata es una glándula exclusiva de los varones que se encuentra bajo la vejiga y delante del recto. Su función principal es producir líquido seminal, que nutre y transporta los espermatozoides. El cáncer de próstata ocurre cuando las células en la próstata comienzan a crecer de manera descontrolada. Aunque en sus primeras etapas puede no presentar síntomas, a medida que avanza, puede causar problemas urinarios, dolor en la pelvis y en etapas más avanzadas, dolor óseo y otros síntomas graves.
Incidencia y Riesgo Poblacional
El cáncer de próstata es el segundo tipo de cáncer más común entre los hombres, después del cáncer de pulmón. Según la OMS, se diagnostican más de 1.3 millones de casos nuevos cada año a nivel mundial. La incidencia varía significativamente según la región, siendo más alta en América del Norte, Europa Occidental y Australia. Sin embargo, sólo en España la incidencia prevista par el 2024 se ha incrementado hasta 30.316 nuevos casos.
Este tipo de cáncer es uno de los tumores que se suelen presentar en edades más avanzadas, siendo diagnosticado generalmente a partir de los 65 años y con una incidencia mayor entre los 70-75 años, mientras que para menores de 50 años suele ser de un 1% aproximadamente.
El origen o causas del cáncer de próstata siguen siendo, en gran parte, desconocidas y son objeto de estudio.
Sin embargo, se conocen algunos factores que aumentan la probabilidad de desarrollarlo. Algunos factores de riesgos incluyen:
- Edad: El riesgo suele aumentarse significativamente a partir de los 50 años.
- Etnia: Este tipo de cáncer es más frecuente en los hombres afroamericanos y de igual forma presentan más probabilidades de desarrollarlo a una edad más temprana.
- Dieta y estilo de vida: Diversos estudios han relacionado determinadas conductas alimenticias como un factor de riesgo, por ejemplo, la ingesta de grasas animales saturadas, carne roja, lácteos con alto contenido de calcio, etc.
- Historial familiar y factores genéticos: Al menos un 20% de los pacientes con este cáncer presentan antecedentes familiares. Los antecedentes genéticos heredados aumentan el riesgo cuando se heredan alelos genéticos de alta penetrancia.
Métodos de Cribado
La detección temprana es fundamental en cualquier tipo de cáncer para la selección de un tratamiento eficaz y de esta forma prolongar la vida del paciente. Durante mucho tiempo, el tacto rectal fue la prueba principal de detección de cáncer de próstata. A finales de 1980, se desarrolló la prueba del antígeno prostático específico (PSA) para la vigilancia del cáncer de próstata. Esta prueba permite de forma sencilla, detectar en etapas tempranas concentraciones elevadas de este antígeno que puede indicar la presencia de cáncer de próstata.
Aunque estos métodos han sido útiles, también presentan limitaciones, tales como falsos positivos y falsos negativos, lo cual puede llevar a sobrediagnósticos y tratamientos innecesarios.
La genética está abriendo nuevas vías en el diagnóstico y manejo del cáncer de próstata. Una de las aproximaciones más prometedoras es la puntuación de riesgo poligénico (PRS, por sus siglas en inglés).
A partir de una muestra de sangre o saliva, se analiza el ADN del paciente que permitirá identificar variantes genéticas asociadas con el cáncer de próstata. Estas variantes se combinan para generar una puntuación total que indica el riesgo relativo de desarrollar la enfermedad.
Varios estudios han relacionado cientos de polimorfismos genéticos comunes asociados con el riesgo a desarrollar cáncer de próstata y actualmente, se estima que estas variantes explican entre el 28- 33% del riesgo familiar de cáncer de próstata.
Entre algunas de las ventajas que supone el uso de PRS como herramienta de prevención se encuentran:
- Personalización del cribado: Los PRS podrían ayudar explicar el riesgo genético en pacientes que no presentan mutaciones en paneles de genes relacionados con cáncer de próstata.
- Reducción de sobrediagnósticos: Al valorar el riesgo genético, mejora el valor predictivo de la prueba del antígeno prostático específico, que puede resultar elevado por otras causas como la hiperplasia benigna de próstata.
- Prevención y manejo: Conocer el riesgo genético aporta información adicional al especialista para una evaluación más precisa del riesgo del paciente con la que diseñar un manejo médico más adecuado.
Los PRS resultan una herramienta innovadora y prometedora para la estimación de riesgo de enfermedades comunes, lo que implica una ventaja en la valoración de factores de riesgo en la práctica clínica. La implementación clínica de los PRS de cáncer de próstata requiere la integración de pruebas genéticas con los métodos de cribado actuales para proporcionar una evaluación completa del riesgo.
En zogen, ofrecemos la prueba Health Check, la prueba genética preventiva con la que podemos conocer si presentamos un riesgo elevado de presentar diferentes enfermedades como cáncer de próstata. Si quieres más información, no dudes en contactarnos.
Fuente: https://www.veritasint.com/blog/es/cancer-de-prostata-riesgo-y-deteccion-temprana/